Cumpliendo la esperada cita con su público Paloma San Basilio, una de las Artistas más importantes de Hispanoamérica de todos los tiempos, llega a New York con su tour “Te lo digo con música”.
Este privilegio que ya han tenido en varios países, donde su espectáculo resultó arrollador, pues la estrella española no ha dejado nada dentro del tintero, y se ha volcado al escenario después de esta pausa obligada de dos años, para entregar a su público un recorrido por toda su trayectoria, interpretando con su garbo y elegancia, canciones icónicas, temas de comedias musicales en varios idiomas, y un entremés de conversaciones con los espectadores, donde una vez más su inteligencia, el poderío de su verbo con tintes filosóficos, ha hecho las delicias de sus seguidores en Miami, Costa Rica y Puerto Rico, donde se agotaron las entradas y quedaron con ganas de una segunda vuelta al ruedo, como se dice en el argot taurino.
La diva sin edad, con piel de porcelana, con su voz de soprano diáfana y sensual, acompañada en el tour por su hija Ivanna Gómez, de la que asegura querer saborear el mayor tiempo posible, compartir todo lo que la vida le presente pues la pandemia ha hecho que todo cobre valor especial y reconoce la consciencia de lo efímero de la vida. Paloma San Basilio ha sido un ejemplo de pulcritud y siempre ha mostrado respeto y gratitud por la prensa y los medios de comunicación a los que atribuye su vigencia cuando no existían plataformas ni celulares, y que con el trabajo a pulso, de promociones interminables y de múltiples entrevistas, lograron posicionarla a ella y a tantos colegas de su época, en los primeros lugares de la radio y a obtener los reconocimientos más importantes en la industria del entretenimiento.
Son varias generaciones las que han cantado a grito herido canciones como “Por qué me abandonaste”, “Luna de Miel”, “Cariño mío”, “Juntos”, y tantos otros éxitos, que definitivamente nunca pasarán de moda y bien vale la pena escuchar en vivo, con una banda extraordinaria de músicos, dispuestos a complacer todas las peticiones que el público haga durante el concierto.
Imperdible entonces para la colonia latina en New York este gran espectáculo de la ganadora del Latin Grammy, que celebra 50 años de vida artística como una leyenda viva, en la plenitud de sus talentos, con su voz impecable, su elegancia, brindando un show polifacético, como una muestra de todas las fantásticas etapas de trayectoria sobre los escenarios.