Alejandro Sanz y Raquel Perera alcanzaron «un acuerdo de divorcio totalmente satisfactorio» para ambas partes, según informaron a EFE los abogados del cantante español, que no han dado detalles del convenio.
Sanz y Perera se casaron en 2012 en la finca del cantante de Jarandilla de la Vera (Cáceres, suroeste de España) tras cinco años de relación y cuando ya había nacido su hijo Dylan (2011).
La exmujer del cantante ha decidido regresar a España por el bien de sus hijos, para que el cantante pueda tener la facilidad de ver a sus hijos con total flexibilidad.